martes, 1 de noviembre de 2011


No sentía mucha ilusión por el concierto de cadena dial de este año, quizás porque la vida me ha vuelto a enseñar que puede cambiar de un día a otro. 

Pero una vez que allí, la espera se convirtió en desesperación  y cada minuto en esa butaca un cumulo de energía que explotó al ver aquel nombre en la pantalla. 

Salió con sus vaqueros, su camisa, su chaleco y su gran voz, mis manos se juntaron apoyándose en mi regazo y los ojos se me empañaron,  volviendo vidrioso el escenario. 

Es difícil explicar lo que viví y lo que sentí al ver a Antonio Orozco en aquel escenario después de diez años. No pensé que sería posible verle antes del concierto que me espera el próximo 8 de noviembre pero allí estaba.

Dos canciones que se hicieron segundos y ese momento que fue un instante fugaz, me siento como aquella niña que le dan un donut de chocolate y te lo quitan antes de poder dar el primer bocado. 

Fue un momento mágico e irrepetible o quizás si … tendré que esperar, solo queda una semana para ser feliz en una butaca!!!

0 comentarios:

Related Posts with Thumbnails

Como pasa el tiempo....

No te pierdas lo nuevo de Revuelto de Neuronas en tu email,¡suscríbete!:

Delivered by FeedBurner

¡¡¡Sigueme!!!

¡Ojo! aquí quedas fichado...