jueves, 11 de noviembre de 2010
 foto de www.fucsia.cl
 

Aajjjj!!! Otro día más el metro está a tope, parece mentira que en esta ciudad subterránea haya tanta gente. Estaba tan cansada… y  además era imposible sentarse para leer un poco, que es el único rato que tengo libre para mi afición, soy una mujer muy ocupada jeje.

En fin de pie y desesperada ya con mi dolor de pies, aparece un chico con el pelo a lo afro. Que gracia!! No sé porque me llamó la atención entre otras cosas porque se parecía a alguien que conocí hace algún tiempo (en concreto hace tres años, en mi etapa estudiantil), entonces recordé esos momentos a mediodía cuando esperaba en la parada y llegaba ese chico de actitud extraña, que parecía ligar y otras solo un andaluz en apuros en medio de Madrid.

Fue tal la confianza que decidió darme que se tiraba todo el trayecto hablando de cosas muy personales, prácticamente yo lo sabía casi todo de él. Sin embargo no sé si él se llegó a dar cuenta que lo único que conocía de mí, era mi ciudad de origen y la parada en la que me apeaba.

Me llegó a ofrecer un trayecto diario en su futuro BMV, cosa que llegue a rechazar, creo que fue cuando se dio cuenta que por mucha confianza que me diera, yo siempre desconfiaba de un extraño como él. Poco después se despidió de mí por que le había salido un trabajo en otra frutería y antes de que yo desapareciera, pues ya terminaba mi modulo, el que desapareció fue él.

Cada vez que paso por aquella parada le recuerdo  y a pesar de la desconfianza (llámame ingenua si quieres…) me dejo un agradable recuerdo, quizás por ese motivo me hubiera gustado volver a encontrarme con aquel chico después de tres años. Igual después de tanto tiempo, se hubiera puesto el pelo a lo afro!!!. Pero no solo fue eso, otro recuerdo.
martes, 9 de noviembre de 2010

 foto de thinkinfreak.com


Tres años atrás, una servidora se hacia hueco entre la muchedumbre de un instituto. Mi tarea era levantarme pronto, ir a clase y superar la meta que me había impuesto.

Entonces vestía deportivas, pantalones vaqueros y jerseys de lana que abrigaran bien, ya que no había día que no fallara la calefacción. En definitiva mi prioridad era ir cómoda.

Mi carpeta y mi bolso lleno de libros nunca faltaban y siempre regresaba a casa con mucha hambre y con pocas ganas de seguir con la tarea.

Tres años después superé la meta y mi trabajo es la prioridad. Ahora los chavales me superan aun más en altura y estupidez adolescente, de la que yo tenía en ese momento.

Después de este tiempo yo he cambiado mis jerseys por ropa  de ejecutiva” e ir a compulsar un título a sido todo un triunfo, antes no me amedrentaba ante la presencia de los “más pequeños”. Aún así volver a aquel instituto que me formo en este viejo arte de la administración, me ha hecho enorgullecerme de mi misma y de todo lo que he conseguido hasta ahora.
Related Posts with Thumbnails

Como pasa el tiempo....

No te pierdas lo nuevo de Revuelto de Neuronas en tu email,¡suscríbete!:

Delivered by FeedBurner

¡¡¡Sigueme!!!

¡Ojo! aquí quedas fichado...